Damaris's dog

Este óleo aún está, secando, en el caballete, motivo por el que pueden observar esos reflejos que he sido incapaz de disimular con el editor de fotos, el aceite refleja como si de un espejo se tratara, espero que los colores no cambien con el secado ya que ahora me gusta como ha quedado. 

Se trata de un encargo, Damaris es la hija de una muy buena amiga, ella quería regalárselo por su cumpleaños y hace tiempo que me hizo el encargo, pero yo no hallaba la inspiración para ponerme a la tarea, puede que debido a la perdida de mi propia mascota en esos días. 

En mi rincón de trabajo.
Lo he dejado varias veces para entretenerme en otras obras totalmente distintas y que habéis visto en post anteriores.

He querido compensar mi tardanza, y he ido, últimamente, a marchas forzadas para que no se me eche encima el verano, este año lo tengo viajero a tope.

Hice dos bocetos, uno de la carita en primer plano y otro de cuerpo entero, al final nos decidimos por el de cuerpo entero, pero no descarto continuar con el otro, me parece que puede resultar algo distinto.

 

Espero que tengan  un feliz fin de semana y un buen verano.

Yo, por mi parte, voy a disfrutar de mis primeras vacaciones de verano desde hace años.